Investigaciones

EL PASADO ABIERTO EN EL PRESENTE / Carlos Del Frade
A 45 AÑOS DEL GOLPE DE ESTADO

Se cumplen 45 años del Golpe de Estado del 24 de marzo de 1976. El inicio de un proceso histórico que aún hoy sigue vivo, marcando las realidades existenciales de las mayorías populares en estos arrabales. El pasado sigue abierto en el presente por las pesadillas impunes y los sueños colectivos inconclusos. Compartimos el prólogo del nuevo libro del periodista y diputado provincial Carlos del Frade, “45 x 45. 45 números y frases a 45 años del golpe de 1976”. Porque la memoria no sirve para el pasado, si no para tener conciencia en cada presente del sueño colectivo inconcluso de ver en el trono de la vida cotidiana a la noble igualdad.


El pasado sigue abierto en el presente por las pesadillas impunes y los sueños colectivos inconclusos.
El proyecto político del golpe iniciado el 24 de marzo de 1976 fue subordinar la vida de las grandes mayorías a las imposiciones del capital financiero.
Lo productivo debía desaparecer en la Argentina.
El dinero debía multiplicar al dinero, filosofía del casino y cuando las cuentas del estado estuvieran al rojo vivo, la solución vendría del gran negocio de los bancos extranjeros a través de préstamos y la perversa bicicleta de la deuda externa.
El derecho laboral, construcción colectiva de generaciones y generaciones argentinas, llamado peyorativamente “el costo argentino”, debía limarse casi hasta la extinción.

Por eso seis de cada diez personas desparecidas eran jóvenes trabajadoras y trabajadores menores de treinta años.
Por eso seis de cada diez personas desocupadas son jóvenes entre quince y treinta años.
Y seis personas detenidas de cada diez en las principales cinco provincias argentinas son jóvenes entre quince y treinta años.
El triple 6, la metáfora bíblica de la bestia apocalíptica que, en este caso, revela una clave de la historia profunda de la Argentina de los últimos 45 años.
Desaparecidos, desaparecidas, desocupadas, desocupados, detenidas y detenidos tienen entre quince y treinta años.
La bestia es la configuración política del capitalismo que siempre castiga a quienes tienen por impulso biológico y cultural producir las necesarias transformaciones en la sociedad.

Pero los últimos años confirmaron la idea fuerza que casi en clave literaria repetimos desde hace tiempo: el pasado sigue abierto en el presente.
El proyecto político económico que impulsó el macrismo tuvo el mismo objetivo que la dictadura, el reemplazo de la producción por la financiarización de la economía.
El estado colonizado a favor de los grandes grupos económicos nacionales y extranjeros, la multiplicación de la deuda externa, la demolición del derecho laboral, la desarticulación de la salud y la educación y el lavado de dinero como verdadero canal de circulación de la riqueza argentina.

Aquello se hizo con botas, 45 años atrás; el macrismo, ahora, lo realizó con votos.
Por eso la permanente necesidad de la memoria y la construcción de conciencia crítica para evitar una nueva etapa del saqueo planificado que solamente democratiza el dolor y la violencia.
Desde Santa Fe asistimos a la permanente renovación del pasado impune: la continuidad de los juicios de lesa humanidad tendrán en 2021 la posibilidad de reconstruir la historia de otro centro clandestino de detención como la llamada “casa de los comandantes”, entre Rosario y Villa Gobernador Gálvez, al mismo tiempo que se encontraron miles de hojas que remiten a los archivos de la persecución estatal desde los años sesenta en adelante, una verdadera burocracia que alimentaría el terrorismo de estado desde el 20 de marzo de 1975, cuando fue invadida Villa Constitución.

Y a nivel nacional todavía subsisten casi dos mil leyes que vienen de las diferentes dictaduras, desde la ley de sociedades, quiebras hasta la ley de entidades financieras que marcan la impunidad del poder económico concentrado.
De allí que también este libro incluya la presentación sobre los delitos de lesa humanidad ocurridos en Vicentín, una verdadera síntesis del capitalismo argentino, desaparecedor y fugador.
Añadimos, además, un proyecto de comunicación sobre la necesidad de construir memoria sobre la masacre de los pueblos originarios, como lo sucedido en 1887 en San Antonio de Obligado, en el norte provincial.
Por otro lado agregamos un informe sobre los grandes medios de comunicación y el poder económico que hicimos en 2019 para saber qué significa hablar de información en la Argentina del tercer milenio.

De tal forma, nuestra esperanza es que este trabajo llegue a manos de todas las generaciones pero especialmente a las nuevas camadas que parieron la revolución feminista, la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo y los movimientos ecologistas como también las delegadas y los delegados que emergen en distintos puestos de trabajo.
Porque la memoria no sirve para el pasado, si no para tener conciencia en cada presente del sueño colectivo inconcluso de ver en el trono de la vida cotidiana a la noble igualdad.


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IMAGEN: Alapalabra.



Carlos Del Frade: Escritor, periodista y docente. Nació en Rosario en 1963. Autor, entre una treintena de trabajos, de "Postales del ex-cordón industrial del Gran Rosario"; "La iglesia y la construcción de la impunidad"; "Desaparecidos desocupados"; "El Rosario de Galtieri y Feced"; "Santa Fue, una provincia robada"; "Matar para robar"; "Ciudad blanca, crónica negra"; "Central Ñuls, la ciudad goleada" y "Perón, la Triple A y los Estados". Fue director periodístico de Radiohistorias (Radio Universidad Rosario) y La Voz del Grillo" (Televisión Regional de San Lorenzo). Es redactor de la Agencia de Noticias Pelota de Trapo y de las revistas El Vecino y El Eslabón (Rosario) y Prensa Regional (Alcorta). Entre otros premios, obtuvo en varias oportunidades el Martín Fierro por su labor en radio; y en el 2005 recibió el Premio Nacional Arturo Jauretche por su labor en los medios de comunicación. En el año 2015 fue electo diputado provincial por el Frente Social y Popular, cargo para el que fue reelecto en el año 2019.